NVIDIA, la compañía que se ha convertido en el epicentro de la revolución de la inteligencia artificial, reveló en su informe a la SEC que solo dos clientes representaron el 39 % de sus ingresos en el segundo trimestre fiscal, finalizado en julio. Una concentración que preocupa a analistas e inversores, pues hace un año esa cifra era del 25 %.
Según los datos publicados, el llamado “Cliente A” supuso el 23 % de la facturación, mientras que el “Cliente B” aportó el 16 %. La identidad de ambos no ha sido revelada oficialmente, y un portavoz de NVIDIA declinó aclarar si se trata de grandes proveedores de nube como Microsoft, Amazon, Apple, Google u Oracle, que figuran entre sus principales compradores de sistemas de inteligencia artificial.
Dependencia creciente de pocos clientes
La directora financiera de la compañía, Colette Kress, explicó que los grandes proveedores de servicios en la nube representaron aproximadamente el 50 % de los ingresos del área de centros de datos, la más importante del negocio y que ya supone el 88 % de la facturación total.
En el documento remitido a la SEC, NVIDIA admite que ha atravesado períodos en los que una parte significativa de sus ventas procede de un grupo reducido de clientes y que esta tendencia puede continuar.
El debate sobre si el crecimiento explosivo de NVIDIA está demasiado ligado a las decisiones de inversión de unos pocos gigantes de la nube gana fuerza. Tal y como señaló el analista Frank Lee, de HSBC, “vemos limitado el margen de revisión al alza de beneficios o catalizadores de la acción a corto plazo, salvo que tengamos mayor claridad sobre las expectativas de capex de los proveedores de nube en 2026”.
¿Quiénes son realmente los clientes A y B?
El misterio no es menor porque, según la propia NVIDIA, existen clientes directos e indirectos:
- Clientes directos: compran chips para integrarlos en sistemas completos o placas, que luego venden a centros de datos o proveedores cloud. En este grupo se encuentran fabricantes como Foxconn, Quanta o Dell, así como distribuidores e integradores de sistemas.
- Clientes indirectos: los que finalmente usan la tecnología (hiperescalares, empresas de internet, gobiernos, etc.), que en muchos casos adquieren los sistemas a través de esos clientes directos.
NVIDIA aclaró que, además de A y B, dos clientes indirectos también superaron el 10 % de la facturación, canalizando sus compras precisamente a través de esos intermediarios. Y añadió un detalle más: una “empresa de I+D en inteligencia artificial” contribuyó con una cifra “significativa” mediante este modelo mixto.
La presión del gasto en IA
La concentración de ingresos se da en un contexto de crecimiento acelerado. Durante la última presentación de resultados, el CEO Jensen Huang pronosticó que la inversión en infraestructura de IA alcanzará entre 3 y 4 billones de dólares a finales de la década.
Según Huang, la compañía podría capturar hasta el 70 % del coste total de un centro de datos de 50.000 millones de dólares dedicado a IA, no solo por la venta de GPUs, sino también de otros chips y componentes que forman parte de su ecosistema.
El directivo justificó ese optimismo en el aumento del gasto de capital de los grandes hiperescalares:
“El capex de los cuatro principales proveedores de nube se ha duplicado en los últimos dos años, a medida que la revolución de la IA entró en plena ebullición”.
Más allá de los hiperescalares: empresas, neoclouds y gobiernos
NVIDIA también destacó que la demanda ya no procede únicamente de los gigantes tradicionales de la nube. Están surgiendo nuevas categorías de clientes:
- Enterprises que construyen sus propios clústeres de IA.
- “Neoclouds”, compañías más pequeñas que buscan ofrecer servicios específicos de inteligencia artificial frente a los gigantes establecidos.
- Gobiernos extranjeros, que según la empresa sumarán 20.000 millones de dólares en ingresos durante 2025 para proyectos de “IA soberana”.
Riesgos y oportunidades
El enorme peso de unos pocos clientes es una señal de fortaleza —porque asegura ventas multimillonarias—, pero también un riesgo: si esas empresas ralentizan sus inversiones, el impacto sobre NVIDIA sería inmediato.
Por otro lado, el hecho de que se diversifique hacia gobiernos, nuevas nubes y empresas fuera del ámbito tradicional abre la posibilidad de ampliar la base de clientes y reducir esa dependencia.
La gran incógnita, por ahora, es si los misteriosos “Cliente A” y “Cliente B” son fabricantes intermediarios o proveedores cloud de primer nivel. La respuesta, todavía reservada en los documentos de la SEC, podría marcar la lectura que los inversores hagan sobre la sostenibilidad del meteórico ascenso de NVIDIA.
Preguntas frecuentes (FAQs)
1. ¿Qué porcentaje de los ingresos de NVIDIA dependen de sus dos mayores clientes?
El 39 % en el segundo trimestre fiscal de 2025, frente al 25 % del mismo periodo del año anterior.
2. ¿Quiénes podrían ser el Cliente A y el Cliente B?
NVIDIA no lo ha revelado. Podrían ser fabricantes OEM/ODM como Foxconn o Quanta, grandes integradores como Dell, o incluso hiperescalares comprando directamente.
3. ¿Por qué preocupa esta concentración?
Porque hace a NVIDIA muy dependiente de las decisiones de inversión de un puñado de compañías. Si reducen su gasto en IA, los resultados de NVIDIA podrían resentirse.
4. ¿Qué papel juegan los gobiernos en la estrategia de NVIDIA?
La compañía espera facturar 20.000 millones de dólares en 2025 por proyectos de IA soberana con distintos gobiernos, lo que diversifica sus fuentes de ingresos.
vía: Reddit