X (Twitter) permitirá a terceros usar tus datos para entrenar sus IA a partir de noviembre

La red social X, antes conocida como Twitter y ahora propiedad de Elon Musk, vuelve a estar en el centro de la polémica. Tras controversias recientes, como el cambio en el sistema de bloqueos, la compañía ha anunciado una modificación en su política de privacidad que permitirá a terceros acceder a los datos de los usuarios para entrenar sus modelos de inteligencia artificial (IA).

A partir del 15 de noviembre, los usuarios de X tendrán que estar atentos, ya que la nueva política establece que la empresa podrá compartir datos personales con «colaboradores» que podrán utilizarlos con fines diversos, incluyendo el entrenamiento de IA generativa y de otro tipo. Según el texto de la política: “Si no optas por no hacerlo, en algunos casos los destinatarios de la información pueden utilizarla para sus propios fines independientes […] incluido para entrenar sus modelos de inteligencia artificial.”

El consentimiento implícito: el usuario deberá oponerse activamente

Esta nueva medida sigue el camino de otras compañías como Meta, que han adoptado enfoques similares, en los que el consentimiento para compartir datos se otorga por defecto. Es decir, si los usuarios no desean que sus datos sean utilizados para entrenar IA, deberán ser proactivos y desactivar esta opción en los ajustes de la red social. Sin embargo, medios estadounidenses han señalado que, aunque se menciona esta opción en el menú de Configuración, todavía no se ha habilitado un botón específico para rechazar el uso de datos con estos fines.

Actualmente, el único apartado en la configuración relacionado con este tema se refiere a la compartición de datos con «socios comerciales», pero está centrado en usos publicitarios, sin mención explícita a la IA.

Motivaciones económicas detrás del cambio

El cambio en la política de X parece estar motivado por la búsqueda de nuevas vías de ingresos. Con la caída de los beneficios por publicidad debido a las controversias que rodean a la plataforma y las decisiones de Musk, como la reinstauración de cuentas polémicas, muchas marcas han reducido su presencia en la red social. La venta de datos para entrenamiento de IA se presenta, así, como una forma de compensar esa pérdida.

El impacto en los usuarios de la Unión Europea

Para los usuarios de la Unión Europea, donde se aplican estrictas regulaciones en materia de protección de datos, como la Ley de Servicios Digitales (DSA) y el Reglamento General de Protección de Datos (GDPR), X ha incluido un punto específico en su política. Los usuarios en este territorio podrán impugnar el uso de sus datos a través de procesos internos o mediante una resolución judicial.

El anuncio también establece que, si un usuario desea rechazar el uso de sus datos con fines de IA, deberá hacerlo de manera proactiva, lo que ha generado críticas por no ofrecer un sistema más directo para el control de la privacidad.

Medidas más severas contra el scraping

Otra novedad en la política de uso de X es el endurecimiento de las sanciones contra el scraping, una técnica utilizada para extraer información a gran escala de una web, como las publicaciones de los usuarios. A partir de ahora, la compañía advierte que cualquier persona o entidad que extraiga más de un millón de tuits al día podría enfrentarse a multas de hasta 15.000 dólares. Aunque el scraping puede ser perjudicial para la privacidad, también ha sido utilizado para investigaciones sobre discursos de odio y otros estudios sociales.

Con estos cambios, X continúa redefiniendo su enfoque empresarial bajo la dirección de Elon Musk, atrayendo tanto críticas como debates sobre los derechos de privacidad de los usuarios y el uso de sus datos personales en el entrenamiento de tecnologías emergentes como la IA.

Más información en X.

Scroll al inicio