OpenAI, uno de los líderes en el campo de la inteligencia artificial, ha anunciado su plan para expandir su equipo global de asuntos públicos, pasando de 35 a 50 miembros antes de que termine el año 2024. Esta medida se toma en respuesta al creciente escrutinio regulatorio al que se enfrenta la industria de la IA a nivel mundial.
Expansión global del equipo de asuntos públicos
El departamento de asuntos públicos de OpenAI está compuesto por miembros distribuidos en países donde la legislación sobre IA está más avanzada, incluyendo Reino Unido, Irlanda, Francia, India, Brasil y Estados Unidos. Este equipo tendrá la responsabilidad de colaborar con los legisladores para abordar los desafíos regulatorios y contribuir a la formulación de leyes futuras que permitan el desarrollo y uso seguro de tecnologías beneficiosas para la sociedad.
Un enfoque en la seguridad y el beneficio tecnológico
El objetivo principal del equipo será trabajar con los responsables políticos para asegurar que las tecnologías desarrolladas por OpenAI sean seguras y puedan ser implementadas de manera beneficiosa. «Queremos asegurarnos de que la tecnología sea segura y al mismo tiempo traer beneficios a las personas», declararon representantes de OpenAI.
Comparación con otros gigantes tecnológicos
A pesar de sus planes de expansión, OpenAI actualmente invierte significativamente menos en esfuerzos de cabildeo en comparación con otras grandes empresas tecnológicas. En el primer trimestre de 2024, OpenAI gastó 340.000 dólares en su relación con el gobierno de EE.UU., mientras que Google y Meta invirtieron 3,1 millones y 7,6 millones de dólares, respectivamente.
Desafíos regulatorios en curso
Esta expansión se produce en un contexto de creciente presión regulatoria por parte de diversas autoridades, incluidos el Departamento de Justicia y la Comisión Federal de Comercio en EE.UU., así como reguladores en la Unión Europea y el Reino Unido. OpenAI, junto con otras empresas del sector, está siendo objeto de un intenso escrutinio a medida que los gobiernos buscan establecer marcos regulatorios que puedan gestionar los rápidos avances en la inteligencia artificial.
La ampliación del equipo de asuntos públicos de OpenAI es una respuesta proactiva a estos desafíos, subrayando la importancia de una colaboración estrecha y continua con los reguladores para asegurar que la innovación en inteligencia artificial se desarrolle de manera segura y responsable.
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